Con el fin de agosto, concluirá el encargo de la presidenta Panista de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Laura Rojas Hernández, en lo que fue el segundo año de la LXIV Legislatura, es decir, se encuentra en los últimos días de su alta responsabilidad republicana.

Ante el inminente acontecimiento, la Presidenta convocó a los medios de comunicación para informar sobre la nueva normalidad legislativa y su propuesta de legado, algo así como «las últimas y nos vamos«.

Derivado de la pandemia del Coronavirus, éste fue un insólito año Legislativo, el segundo de esta Legislatura, por lo que la legisladora anunció que presentará una serie de reformas a la normatividad parlamentaria para optimizar el funcionamiento de la Cámara de Diputados y sus procesos.

Dirían los que saben de las actualizaciones y sus conceptos, una “necesaria reingeniería”, de nueve reformas en seis bloques, cuyo objetivo es procurar la paridad de género en todos los órganos internos; abonar a la agilidad de los procedimientos o trámites parlamentarios y tener la posibilidad de contribuir en la formación de las y los diputados.

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Se informó que algunas de las iniciativas cuentan con el apoyo y consenso de los líderes parlamentarios. Destacan las relativas al Parlamento Abierto; implementar la modalidad de sesiones a distancia, con todo y votaciones remotas, en casos de contingencia como la que hoy vive la humanidad en su conjunto; legislar con perspectiva de género para que la igualdad sustantiva sea una realidad y no sólo sea izada como emblema partidista de ocasión; hacer precisiones al reglamento para conducir las sesiones, toda vez que la simple interpretación, en el caso de las reservas, ha evidenciado los desacuerdos que se dan ante la falta de claridad en la norma.

Se buscará reorganizar los Centros de Estudios: de Derecho e Investigaciones Parlamentarias, de Estudios Sociales y de Opinión Pública, de la Finanzas Publicas, de Logro de la Igualdad de Género, para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria, así como las modificaciones a la Ley Orgánica del Congreso. De igual forma, se pretende profesionalizar a los legisladores que conformen los Grupos de Amistad con las distintas naciones del mundo, así como quienes integren las delegaciones mexicanas ante organismos internacionales, entre otras actividades.

Dado que este gobierno clama para todo el ahorro y la austeridad en el ejercicio presupuestal, la diputada Presidenta propondrá que el presupuesto responda a las necesidades nacionales ante las crisis que tenemos, protección y seguridad social, reactivación de la economía y atención a los millones de mexicanos que están en situación de pobreza, derivada de la pandemia y de los casos de emergencia que se puedan suscitar. Es todo un desafío, un reto, porque el grupo mayoritario y sus aliados solo responden a las instrucciones del Poder Ejecutivo.

Pero esto y otros pendientes para el último año de la legislatura, está lo relativo al uso lúdico de la marihuana, pues hay un mandato de la Corte que el Poder Legislativo debe asumir con responsabilidad.

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Lo cierto es que aún no se dan mayores detalles sobre el desarrollo de la sesión preparatoria. Por más que comiencen las elucubraciones sobre qué Grupo Parlamentario presidirá la Mesa Directiva en el año electoral, la diputada se refirió a las diferentes opciones (con sana distancia o a la 4t) para realizar esa sesión parlamentaria. Debe reconocerse que es muy complicado sesionar con 628 Legisladores en el recinto de San Lázaro aun con todas las medidas sanitarias de prevención.

Aunque no se ha discutido a fondo, es probable que la sesión de Congreso General del primero de septiembre de este 2020, se realice en una sede alterna más amplia, para cumplir con los protocolos de sana distancia entre los legisladores.

Son muchas las iniciativas y las modificaciones, como varios son los puntos de acuerdo y los asuntos que requieren ser analizados, debatidos y dictaminados por las y los parlamentarios. Que se escuche su voz, así sea con cubrebocas y que lo utilicen aun cuando no se haya acabado la corrupción. Es difícil pensar, a la luz de los datos oficiales, que la Ciudad de México obtenga la luz verde en el semáforo epidemiológico, por lo que es urgente revisar la normatividad para adecuarse a las condiciones que permitan el funcionamiento del Poder Legislativo. Urge que estas propuestas se sometan al Pleno de la Cámara de Diputados. Tal cual, estamos en las últimas para que suenen «Las Golondrinas» a la legisladora de Acción Nacional, estaremos pendientes de a quien le entregara la Presidencia de la Cámara para el último año de esta Legislatura.

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